Tips para el buen entrenamiento de los Pomeranios
Los Pomeranios son uno de los perros más populares a los que los dueños de animales de todo el mundo les encantan adorar. Esta raza compacta, alegre y cariñosa es ideal para una familia que quiera un amigo leal, listo para demostrar su afecto. Aunque encantador y lleno de vida, el entrenamiento de un Pomerano no es para principiantes. Si estás interesado en tener uno de estos lindos perros ilustres, hay algunas cosas importantes que necesitas saber sobre su entrenamiento antes de hacerlo.
Antes de nada, hay que entender que los Pomeranos tienen un carácter muy fuerte y tienen sus propias ideas sobre lo que quieren hacer. Si no reciben el entrenamiento adecuado, eventualmente harán lo que quieran. Esto puede incluir ladrar con el propósito de controlar a los humanos, ladrar a todos los extraños, morder a otras personas o a otros animales, o simplemente hacer cosas por su cuenta que los dueños no quieren que hagan. El entrenamiento de un perro Pomerano, sin embargo, puede convertirlo en un amigo obediente cuyas metas se alinean con las tuyas.
Una vez que hayamos entendido el carácter decidido del Pomerano, el siguiente paso para el entrenamiento adecuado es asegurarse de que tenga un largo período de calma para asimilar sus nuevas obligaciones. Esto se debe a que es común ver que los perros Pomeranos se cansan fácilmente, para ellos un buen descanso es imprescindible. Les resultará más fácil aprovechar el tiempo para aprender nuevas habilidades cuando estén descansados.
Hay tres cosas fundamentales para entrenar a un Pomerano: la consistencia, la recompensa y la diversión. La consistencia es primordial para que el Pomerano aprenda lo que espera de él. Si se le pide que haga algo una vez y luego rompemos nuestras propias reglas, el perro perderá el respeto de nosotros. La segunda característica importante es la recompensa. Los perros responden mejor a recompensas como golosinas y elogios verbales que les reconocen su comportamiento. Por último, el entrenamiento de un Pomerano debe divertirse. Esto se debe a que este tipo de perros se aburren fácilmente. Introducir nuevos ejercicios, juguetes y situaciones ayudará a mantenerlos motivados y mantenerán su atención en la tarea a mano.
Otra parte del entrenamiento de un Pomerano que los dueños deben entender es que hay cierto límite a lo que debe ser esperado de ellos. Estos perros tienden a tener problemas con el entorno, por lo que los dueños deben entender que sus mascotas probablemente no se porten bien con otros animales o extraños. Por lo tanto, es importante entender el temperamento de los Pomeranos y estar consciente de sus limitaciones para que los dueños de animales no esperen demasiado de ellos.
Los Pomeranos también tienen problemas con la destrucción si no están correctamente entrenados. Estos perros son quisquillosos y necesitan sentir una disciplina adecuada para que los dueños puedan evitar comportamientos problemáticos. Asegúrate de reforzar consistentemente los buenos comportamientos con recompensas para desalentar los malos. De esta manera, el Pomerano adaptará su comportamiento a lo que el dueño de animales espera de él.
Por último, los dueños de Pomeranos también deben entender que los Pomeranos tienen un instinto de ladrar naturalmente. Esto puede volverse problemático si los dueños no logran reducir el ladrido excesivo de su perro. Esto se puede lograr de varias maneras, comenzando por conocer la causa de los ladridos del Pomerano. Entrenar a un Pomerano también requiere equilibrar el enfoque de los entrenamientos. Los dueños deben demostrar una firmeza consistente, pero nunca deben usar la violencia si quieren que su Pomerano responda bien.
En definitiva, el entrenamiento de un Pomerano puede ser retador a veces. Sin embargo, los dueños deben tener cuidado de no desalentarse y mantenerse persistentes. La diligencia y el uso de un enfoque consistente, recompensas divertidas y un respeto al temperamento de esta raza única, les ayudará a construir la confianza y el fuerte vínculo que espera tener con su Pomerano.